16 marzo, 2007

Las cuotas de la igualdad

El Congreso aprobó ayer la ley de la Igualdad (de sexos se supone aunque el título no lo mencione).

Vaya por delante que legislar sobre lo evidente suele ser más propagandístico que eficaz, pero en este caso brindo por el paso dado hacia el establecimiento de medidas que permitan evitar la discriminación de la mujer por el hecho de ser mujer o peor aún por el hecho de ser madre.

No cabe duda de que las cosas en este terreno han mejorado de forma muy significativa en estos últimos años. Siempre comento que la historia tendrá que acabar haciendo un hueco en sus altares más luminosos a las mujeres de la generación que estamos viviendo, ya que no fueron las pioneras de los siglo XIX y XX que consiguieron el voto o el divorcio sino las que están rompiendo los clichés, batallando en todos los terrenos, superando las barreras y sobre todo destrozando una posición de dominio machista tremendamente arraigado. La mujer pionera de la lucha femenina fue una mujer comprometida con una causa. La mujer de mi generación es una guerrera tenaz que vencerá.

La Ley aprobada ayer es un paso. Pero tiene un punto que me parece interesante comentar. El PP se abstiene de votar a favor (ellos sabrán lo que hacen) porque la Ley establece cuotas en listas electorales y consejos de administración. De alguna forma, dicen, se coarta la libertad. Y siendo puristas tienen toda la razón. En un mundo perfecto de igualdad de oportunidades, no son necesarias las cuotas puesto que la selección natural lo hace todo.

Pero,¿es un mundo perfecto de igualdad de oportunidades el que vivimos?. En un mercado laboral en el que estadísticamente hay igualdad de hombres y mujeres, ¿es lógico que los hombres ocupemos más del 90% de cargos o que ganemos significativamente más dinero?. La realidad es tozuda frente a eso. Falta mucho terreno por ganar y precisamente una ley agresiva y que obliga a que la estadística se aplique es un instrumento eficaz que se puede y se debe utliizar. La Ley no creará listas electorales peores o Consejos de Administración peores a los actuales. No somos mejores ni peores. Si hay estadísticamente igualdad de personas de ambos sexos, una distribución paritaria estadísticamente dará resultados paritarios (de hecho, sigo matemático, lo siento, el resultado tiene que ser indefectiblemente mejor).

Me encantará que esa parte de la Ley quede derogada por la fuerza de los hechos, lisa y llanamente porque no es necesaria. Hoy por hoy, tenemos que empujar a que en un mundo en el que todos tenemos los mismos derechos en teoría, los tengamos en la práctica y el día en que una cosa y otra sean iguales, las leyes no serán necesarias.

Sed felices, nunca cejeis en ese intento

Mistery

1 Comments:

At 10:40 a. m., Anonymous Anónimo said...

Querido Mistery,
gracias por la parte que como mujer me toca, por tu alegato defensor de las mujeres.
Es que eres un encanto!!!

En total acuerdo con tu afirmación... No somos ni mejores ni peores... simplemente somos diferentes.(para goce de ambas partes jajaja).

Lo que ocurre es que con las leyes tampoco hay que hacerse demasiadas ilusiones... creo que lo que realmente será efectivo es que cambien algunas mentalidades obtusas... que todavía quedan muchas.


Muy feliz fin de semana.

Besos mil.

 

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