30 junio, 2005

La Alemania de los hermanos Marx

Resulta que Shröeder quiere adelantar las elecciones. Supongo que le venía mal el día en el que iban a tener lugar, vaya usted a saber.

La constitución alemana, cuadriculada ella, ¡cómo no!, dice que no se pueden adelantar las elecciones. Que lo que tiene que hacer el primer ministro es someterse a una cuestión de confianza en el Parlamento y que si la pierde, pues entonces ya se pueden adelantar los comicios.

Así que el Primer Ministro lo que tiene que decir a sus propios miembros del partido es que le voten en contra, así pierde la votación y así puede adelantar esas elecciones. Sencillo ¿verdad?.

Pues nada, que el Schröeder va y se lo cuenta a los miembros de su partido y estos le dicen.. ¿votarte en contra?, ¿a tí? , ¡No!, ¡oh lider nuestro!
Que sí, coñes, les dice Schröeder (ya se podía llamar de otra forma el tío éste que cada vez que escribo su nombre me tiro media hora), ¡que me tenéis que votar en contra para hacerme un favor!.

¡Nunca te votaremos en contra!, dicen 100 de ellos. Y el pobre Schr... me niego a escribir el nombrecito otra vez, se desespera. ¡Que no me querais tanto, coñes!, ¡que quiero que me voteis en contra!.

Al final, este país ex-locomotora de Europa, ex-ejemplo paradigmático de tantas cosas no adelanta las elecciones, hunde la economía europea y nos arrastra a todos en esa caída.

Si al menos se gastaran más dinerito en los chiringuitos este verano ....

Sed felices. Nunca cejeis en ese intento

Mistery.

1 Comments:

At 8:35 p. m., Anonymous Anónimo said...

La política no es mi fuerte ni una de mis pasiones,pero agradezco que des luz a mis pocas pretensiones en ese campo,es de sabios escuchar a los que sienten otras inquietudes.
Un saludo en éste Julio que amanece...

 

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