04 mayo, 2005

letanía del atasco

No existe otro tema de conversación hoy por aquí (hay que aclarar que aquí, como casi siempre es Madrid, que es curioso que todos los que estamos en Madrid, decimos aquí para decir Madrid estemos donde estemos hablemos con quien hablemos).

¿Tu cuanto tiempo te pasaste en el atasco?. Y a partir de ahí toda una relación de historias a cada cual más espantosa, más desesperada, más desesperante.

Curiosamente todos eran a la salida, que a la vuelta nadie pasó por esas penurias. Y fíjate que lo de volver es más penoso que lo de irse, pero en esta ocasión hemos querido hacer penosa la salida.

Sinceramente no lo entiendo. Si todos los que salimos hemos vuelto, ¿Por qué a la salida hubo caos y a la vuelta fluidez?. ¿Quien es el artista que logra eso que nos pide la DGT que se llama escalonamiento? (imagino que sea a través del 'pásalo' de los SMS, porque si no, no comprendo como nos hemos puesto de acuerdo 400.000 coches en escalonarnos tan ricamente). En fín, misterios insondables.

Hubo locutores que en un alarde de osadía interrogaron al director de tráfico (y digo osadía, porque si te metes con esa gente seguro que te cazan al día siguiente con el velocímetro pasado de vueltas). El susodicho director, en lugar de admitir algún tipo de responsabilidad, vino a decir que es que las ciudades están mu malamente, oiga usted, y que en cuanto la gente se puede escapar de ellas, la gente, se escapa. La solución para el señor director no está en carriles adicionales, agentes que apresuren a la gente, medios para desatascar incidentes, etcétera. La solución está en hacer las ciudades más agradables para que la gente no se quiera ir de ellas.

En fin. Que Ibarra le ha dicho a Maragall que se meta los cuartos donde le quepan. Eso es política de altos vuelos y no la del señor director de tráfico.

Sed felices. Nunca cejeis en ese intento

Mistery.

1 Comments:

At 11:17 a. m., Blogger Unknown said...

Que le vamos hacer...si la cosa es así,si cada año es igual,lo suyo seria montar algun que otro espectaculo a las afueras de las autovias, tipo merenderos,cines,hacer shopping,es decir tener la oportunidad cuando ya no aguantas más los atascos, de desviarte, y tomartelo con filosofia y una caña.
Bueno.... la verdad ,que ¡a lo echo ,PECHO¡.La cuestión es ¿si merece la pena, ese tormento de atasco,por pasar cuatro dias o tres, los que sean fuera de la urbe?.Ya hay cada cual, su opinión....
¿cUANDO HAY OTRO GRAN PUENTE??,jeje

 

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